martes, 8 de junio de 2010

LAS EXPRESIONES CULTURALES EN LA CONVIVENCIA DE MI COMUNIDAD.
Es el barrio Kennedy, de la ciudad de Girardot, lugar donde se recrean las personas desde el preescolar, hasta llegar a la tercer edad., es allí donde los individuos estan inmersos en una cultura protagonica desde el ambito educativo, siendo participes en eventos para recrear artisticamente,en especial a la tercera edad, donde se invitan a participar a los abuelos en actividades como : ejercicios, eventos sociales, artistico-culturales y se recrean en el baile, originandose en este grupo una verdadera convivencia.

domingo, 6 de junio de 2010

Trabajo Colaborativo 2

EXPRESIONES CULTURALES
CONVIVENCIAVALORESMEDIOS MASIVOS Y COMUNICACIÓN

CONVIVENCIA Y EXPRESIONES CULTURALES COLABORATIVO 2

PRESENTADO POR.
YOLANDA BAQUERO ALVAREZ
HAIBER JAIR ZARATE SOSA
TUTOR: José Julián Ñañez

Mayo 24 – 2010

INTRODUCCION
El presente trabajo aborda una serie de contenidos esquematizados en el contexto de las expresiones culturales y la convivencia en un orden esquematizado de ideas principales en los diferentes aspectos los cuales están inmersos dentro de una sociedad a través de las cuales las expresiones culturales y artísticas son el resultado de una convivencia y evolución influenciada por factores, culturales, económicos, sociales y religiosos.
En el otro ámbito se encuentra los aspectos relativos a los derechos humanos enmarcados en una cultura democrática y de ética ciudadana la cual debe contribuir a la construcción de las relaciones sociales tan deterioradas en nuestros países, al lograr con plenitud, la justicia y la paz. Todo ello supone un concepto mínimo de valores y principios éticos derivados de la doctrina de los mismos derechos.
La teoría de las culturas hibridas, es una teoría que intenta explicar el proceso de la generación de identidades en el contexto latinoamericano. Un continente en que aun la modernidad no llega en el sentido Europeo. En ese sentido, la pregunta que puede saltar a la vista es si la modernidad es el principal objetivo a cumplir.

OBJETIVOS

 Especificar aspectos de la sociedad en una estructura de cambio en crecimiento, permanente y evolución.
 Conocer aspectos de las expresiones culturales que contribuyan a la construcción social.
 Contribuir en el camino de la convivencia en una nueva cultura de los derechos humanos por medio del camino en la educación.
 Conocer el concepto de hibridación partir de la historia del arte y la literatura, el folclor y la antropología y, por último, los trabajos sobre comunicación.

1. EXPRESIONES CULTURALES Y CONVIVENCIA


2. DERECHOS HUMANOS EN LA CONVIVENCIA

Los derechos humanos parten de una necesidad racional por estar en igualdad de condiciones, principio que se ve afectado por la individualidad del ser que por su misma escancia muestra superioridad frente a los demás.La convivencia en si lleva implícito algunas normas básicas, que no la caracteriza de seres racionales, como es el respeto a la vida, la búsqueda de un líder entre otras características de una comunidad. Por lo tanto se puede decir que estos valores implícitos en cada ser también han venido evolucionando y se han reevaluado.
Siendo denominados actualmente como derechos humanos. Que a la vez encierra un elemento subjetivo y es la compensación si tenemos derechos humanos de igual forma tenemos deberes humanos que da como resultado una perfecta convivencia.
Técnicamente los derechos humanos son valores principios, exigencias éticas y cívicas, así como normas legales indispensables para la convivencia y el desarrollo de una verdadera sociedad, rigen las relaciones de convivencia humana.
Según la Declaración Universal de Derechos Humanos, éstos son el ideal común por el que todos los pueblos y naciones deben esforzarse, ya que se fundamentan en el reconocimiento de la dignidad y del valor como cualidades intrínsecas de los humanos; es decir, que tanto el hombre como la mujer son un fin en sí y no un medio o un instrumento «para» otros fines.
“Por ello, una persona no puede ser utilizada como instrumento con ningún pretexto. Los seres humanos no estamos al servicio de una religión, una ideología, una cultura, un sistema político o económico, ni de otra u otras personas, sino que todo ello, por el contrario, sirve o contribuye a nuestro desarrollo como seres dignos.”
La educación es una vía privilegiada para construir un modo de convivencia que permita alcanzar «la aspiración más elevada del hombre, el advenimiento de un mundo en el que los seres humanos, liberados del temor y de la miseria, disfruten de la libertad de palabra y de la libertad de creencias».«La educación tendrá por objeto el pleno desarrollo de la personalidad humana y el fortalecimiento del respeto a los derechos humanos y a las libertades fundamentales: favorecerá la comprensión, la tolerancia, la amistad entre todas las naciones y todos los grupos étnicos o religiosos y promoverá el desarrollo de las actividades de las Naciones Unidas para el mantenimiento de la paz.
La Unesco señala las actitudes y conocimientos esenciales en una educación en derechos humanos, resumidos así:
1. Aceptación a personas de distinta etnia, religión, nacionalidad y cultura.
2. Reconocimiento de que los derechos humanos básicos son iguales para todos.
3. Tolerancia hacia otras convicciones, hábitos, sistemas sociales, económicos y políticos.
4. Reconocimiento a la aportación de otros pueblos en aspectos importantes de la civilización.
Nuestra sociedad actualmente está caracterizada por la diversidad cultural, y donde se presenta por numerosos conflictos tanto personales como sociales que a la vez desestabilizan la posibilidad de convivir de manera armónica.
Se hace necesario encontrar soluciones para logar un entendimiento entre las diferentes culturas, es la educación uno de los primeros pasos para contribuir dicha solución.
“El término multiculturalismo sirve para hacer referencia a dos aspectos simultáneos. Por un lado es un término descriptivo, es decir, designa la variedad cultural que se ha dado en distintas sociedades a lo largo de la historia. Podemos decir que todas las sociedades son multiculturales, ya que desde siempre distintas etnias y culturas han entrado en contacto y coexistido, aunque no necesariamente de manera pacífica. De hecho, el segundo significado asociado con el término “multiculturalismo” hace referencia, precisamente, a la necesidad de que esa convivencia armónica se produzca. Desde hace unas décadas, el multiculturalismo se ha propuesto como un sistema social que, a través de una serie de normas y leyes reguladas políticamente, sea capaz de asegurar el respeto a la diferencia”.

3. CULTURAS HIBRIDAS

Para explicar su teoría, Canclini parte de 3 hipótesis. La primera de ellas afirma que la incertidumbre acerca del sentido y el valor de la modernidad deriva no solo de lo que separa a naciones, etnias y clases, sino de los cruces socioculturales en que lo tradicional y lo moderno se mezclan; esto es, una hibridación, sincretismo o mestizaje. De esta manera, el entendimiento de tal hibridación parte de la reconstrucción de la misma a partir de la historia del arte y la literatura, el folclor y la antropología y, por último, los trabajos sobre comunicación.
La segunda hipótesis afirma que el estudio de tales disciplinas puede generar otro modo de concebir la modernización de Latinoamérica; estos es, entenderla más que como una fuerza ajena y dominante, que operaría por sustitución de lo tradicional y lo propio, como los intentos de renovación con que diversos sectores se hacen cargo de la heterogeneidad multitemporal de cada nación.
La tercera y última hipótesis sostiene que el estudio interdisciplinario puede arrojar luces sobre los procesos políticos en América Latina; es decir, la democracia moderna combinada con relaciones arcaicas de poder, instituciones liberales con hábitos autoritarios, movimientos sociales democráticos con regímenes paternalistas, y las transacciones de unos con otros.

Hibridación, Hegemonía y Ciudad.
Para comprobar su teoría de las culturas híbridas, que en últimas no es otra cosa que la combinación entre lo culto moderno con lo popular tradicional y que se hace patente en las manifestaciones artísticas -como la plástica, la pintura, la escultura, la literatura, etc.- de los latinoamericanos. Sin embargo, entender tal hibridación requiere estudiar el papel hegemónico de lo que se puede entender como culto (comprensible solo para las elites con mayor nivel en la escala educativa) pero que en algún momento se combina con lo popular cuando las nuevas tecnologías de la comunicación, permiten un proceso de socialización mayor del arte, involucrando a las clases populares. Clases que si bien no entienden del todo el arte culto, si vienen a ser víctimas de un proceso mediante el cual el control político de la elite se hace patente; recalcar en tradiciones políticas, en las representaciones artísticas que ayudan a forjar una identidad de lo nacional (involucrando el carácter identitario de una parte de las clases, y no de la totalidad de la nación) producen un proceso mediante el cual el dominio de las elites se refuerza.

Asimismo, el mejor lugar para encontrar tal hibridación es la ciudad donde se mezcla lo culto, lo popular y lo masivo. Así, lo culto tradicional no es borrado por la industrialización de los bienes simbólicos; lo popular no se extingue, sino se transforma mediante el desarrollo de prácticas modernas; los productos mantienen sus funciones tradicionales (dar trabajo) al tiempo que atraen a turistas y consumidores urbanos que encuentran en los bienes folclóricos, signos de distinción que los bienes industriales no ofrecen. En una palabra, el papel de lo culto y lo popular se disminuye en el mercado pero ninguno de los dos es suprimido.

La Postmodernidad Latinoamericana.
Sea como sea, esta mezcla entre lo culto, lo popular y lo masivo, crean una situación postmoderna, entendida como ruptura con lo anterior. Mientras en el arte, la arquitectura y la filosofía las corrientes postmodernas son hegemónicas, en la política y la economía prevalecen objetivos modernizantes; se hace un llamado a que los Estados de América Latina incorporen avances tecnológicos, modernicen la economía, superen en las estructuras de poder alianzas informales, la corrupción y otros resabios pre-modernos. De cualquier manera, ni el progresismo evolucionista, ni el racionalismo democrático han sido entre nosotros causas populares.

Entonces, ¿cómo hablar de posmodernidad? La modernidad es vista como un simulacro de las elites y los aparatos estatales. No se creó una cultura nacional sino una cultura de elites. Pese a esto último, existe una articulación compleja de tradiciones y modernidades.
Por su parte, la modernidad se encuentra constituida por 1) un proyecto emancipador, 2) un proyecto expansivo, 3) un proyecto renovador, 4) un proyecto democratizador. Cuando se habla del primero, se hace referencia a la racionalización, individualismo, secularización. En el segundo caso, se habla de una extensión del conocimiento, la promoción de los descubrimientos científicos y desarrollo industrial. En el tercero, se busca el mejoramiento y la innovación incesante, y la reformulación de los signos de distinción que el consumo masificado desgasta. Por último, en el cuarto, se entienden todas aquellas políticas para el mayor número posible de población en cuanto a educación y la difusión del arte y saberes especializados, para una evolución racional moral.
Lo anterior lleva a Canclini a formular una definición más elaborada desde los estudios de Habermas para quien la modernidad se encuentra constituida por la independencia de la cultura de la razón en 3 esferas autónomas ciencia (conocimiento), moralidad (justicia) y arte (gusto), Boudieu quien la ve como la integración con relativa independencia de los campos artísticos y científicos (las sociedades modernas necesitan de divulgación y a la vez distinción), y Becker que afirma que el mundo del arte es cooperación y a la vez competencia. Sin embargo, en el mundo moderno las restricciones son convenidas y no impuestas por un orden teológico y político a la vez que el número de actividades de producción artística, ha aumentado. En resumen, la modernidad implica tanto procesos de segregación como de hibridación entre los diversos sectores sociales y sus sistemas simbólicos; las diferencias entre culturas y entre clases se concilian en el encuentro del arte culto con los espectadores populares.

Contradicciones latinoamericanas.
Si bien el autor afirma que el Arte ya no se puede entender en su sentido utópico de elaboración individual en la que el artista realiza un proceso creador sin ningún interés específico, la historia del arte en América Latina en todas sus manifestaciones demuestra que desde los años 60, cuando hay un mayor número de personas que pueden acceder al sistema educativo en niveles más avanzados, se produce una suerte de mercado cultural en el que los procesos creadores se perciben ahora para un mayor número de personas en capacidad de comprar cultura. Es así como la cultura misma se vuelve masiva y la iniciativa privada, dada la incapacidad estatal, viene a ser la forjadora, desde sus estándares, de lo que puede ser considerado cultural.
Esta contradicción en el nivel artístico, deja entrever un proceso político mucho más amplio en la realidad del continente. Un continente en el que si bien se produjo una modernización, entendida como la adaptación de procesos industriales que masifican la producción (si bien no al nivel de los Estados desarrollados), no se produjo una modernidad como el proceso de ruptura con una tradición. Lo contrario, la forma de creación de una identidad nacional desde las elites, respondió, más que una ruptura con lo tradicional, con la revalorización de lo primitivo con el fin de crear nación. En ese sentido, la hibridación misma fue la modernidad para América Latina.
Modernidad que si bien diferente para países como los mexicanos donde su propia revolución llevó a crear una cultura hegemónica desde la socialización que intentó darle el Estado al arte, en los otros países del continente, la hegemonía no resulta ser del todo evidente en la medida en que lo subalterno no se conjugo con lo culto moderno. Es así como en tales países lo culto sigue siendo elitista (hegemónico) y se encuentra en constante confrontación con lo tradicional (popular y subalterno) llevando a que el sentido de nación sea mucho más difícil de construir.

CONCLUSIONES
Los individuos inmersos en un circulo social están contribuyendo en la construcción de la sociedad aportando al progreso por medio de su producción cultural desde lo relativo al aspecto artesanal hasta producciones más elevadas en el ámbito material o espiritual.
Para ser educadores en derechos humanos y en democracia no basta que tengamos ideas claras o conocimientos teóricos sobre estos temas: es fundamental que nos sintamos convencidos de su utilidad para la construcción de una sociedad más humana, y nos comprometamos afectivamente con ella. La propuesta de educar en derechos humanos y en democracia será real cuando interioricemos y asumamos en forma intelectual y emocional su necesidad e importancia.
la cultura moderna ha sido compartida por una minoría (mucho más amplia, es evidente, que si no hubiera habido revolución) y que las culturas étnicas o locales no se fusionaron plenamente en un sistema simbólico nacional, aunque tampoco ya pueden ser ajenas a él. Ni el proyecto modernizador ni el unificador triunfaron totalmente. Pero su éxito relativo tampoco autoriza utopías tradicionalistas. Dicho de otro modo no llegamos a una modernidad, sino a varios procesos desiguales y combinados de modernización. Por eso hoy el rasgo más definido, el adjetivo menos indeciso en el discurso de los funcionarios culturales, no es el de nacionalista o indigenista o moderno, sino el que designa a la sociedad como pluralista.

BIBLIOGRAFIA

 Goyeneche, Rodríguez John Mauricio. Convivencia y Expresiones Culturales. Universidad Nacional Abierta y a Distancia. Bogotá. 2008.
 La diferencia cultural y el género. Construyendo contigo la igualdad. Documento PDF. Edita consejería de la presidencia, Instituto Australiano de la mujer.
 Un reto en la Escuela. Los derechos humanos y la convivencia. Edita, Cruz Roja Colombiana. Madrid 2007. PDF.
 García Canclini Néstor. Culturas Hibridas. Estrategias para entrar y salir de la modernidad. Ediciones Grijalbo. México. D F. 1990.
 Mujica Rosa María. Educación Derechos humanos y democracia. PDF.

jueves, 15 de abril de 2010

Mis esfuerzos

Nuestra recompensa se encuentra en el esfuerzo y no en el resultado. Un esfuerzo total es una victoria completa.

domingo, 28 de marzo de 2010

Colombia desde la bioética ; se entiende por este concepto como la disciplina que estudia y analiza los problemas éticos de la vida y que se notan a diario durante este auge de la influencia en la ciencia y la tecnologia .
En Colombia todas las personas debemos de contribuir arduamente y con muchos esfuerzo al tema de la bioética relacionada con nuestras circunstancias y con nuestos recursos de los que disponemos , esto incluido en nuestro ambito sociocultural y y situandonos que somos un pais en via de desarrollo . Nuestro país rico en el aspecto geografico, la constitucion de la nacionalidad en los grupos étnicos primarios y de los cuales se nota el respeto por la vida y la naturaleza, tambien la influencia europea durante la epoca de la conquista y colonia que permitio el mestizaje para asi enriquecer mas nuestro pais culturalmente.
No debemos ignorar el otro aspecto que afecta a nuestra Colombia en lo que respecta en l a desigualdad social, los grupos armados y la injusticia es por esto quedebemos contribuir en la solución de estos problemas dando aplicabilidad a los principios de la NoMaleficencia,la benefiicencia, la autonomia y la justicia .